El fin del verano no tiene por qué significar que se acaben los viajes, conocer otras zonas, visitar distintas localidades… El otoño también es ideal para bien disfrutar de días de vacaciones que queden o para realizar alguna escapada de fin de semana o un puente. Los destinos de interior son una buena opción para estos casos. Y, dentro de ellos, hay comunidades como Navarra que son ideales porque en su territorio hay numerosos pueblos para vivir una escapada de ensueño. Aquí vamos a proponerte algunos municipios.
Los pueblos
Como hemos dicho, Navarra tiene numerosos pueblos. La elección no es fácil. Pero hay algunos de ellos que destacan por alguna particularidad. Es el caso de Lesaka que está considerado como uno de los más bellos en la zona norte. Entre sus atractivos, destacan los más de 20 canales, sus casas señoriales de color y el olor a envejecido.
Otro destino es Milagro, situado en la Ribera de navarra. En esta localidad no hay que perderse los restos romanos como la tumba de inhumación de la época o el fragmento de anillo de hierro.
Pero si lo que se busca sobre todo es el senderismo, el lugar ideal puede ser Garoia, en el valle de Aezkoa. Este pueblo es como una puerta de entrada a las primeras cumbres pirenaicas navarras, ya que está arropado por un bosque de grandes dimensiones junto al río Zorrate.
El recorrido por Navarra también nos lleva a Cirauqui, situado entre Estella y Puente la Reina. Visitarlo es como volver al medievo porque sus calles son empedradas y las cuestas son empinadas, aparte de haber numerosos restos antiguos como la calzada romana que unía Pamplona con Varea.
Y, finalmente, esta ruta la vamos a acabar en Petilla de Aragón. Conocido como la isla de Navarra, por estar fuera de las fronteras de la comunidad, es rico en patrimonio. Pero, además, es una localidad muy conocida porque es donde nació el científico Santiago Ramón y Cajal del que, por ejemplo, se puede visitar la casa natal y exposiciones sobre su vida y obra.