Visita cultural a Potsdam


La “perla” de Brandemburgo solo queda a 30km. al suroeste de Berlín y representa uno de los países culturales más bonitos de Alemania. Durante un periodo de más de 300 años, los mejores artistas embellecieron bajo la orden de los soberanos de la dinastía Hohenzollern sus residencias con maravillosos parques y jardines. Debido a eso, Potsdam fue nombrado monumento cultural de la humanidad del patrimonio natural y cultural de la UNESCO en 1990.

Potsdam es hoy una ciudad con unos 150000 habitantes y la capital de Estado Federal de Brandemburgo. Lo más conocido de la ciudad es el refugio privado de Federico II; “Sanssouci” un palacio de verano, construido en 1745 sobre un viñedo. El palacio, es una pequeña joya de la época Rococó al igual que el palacio destinado para sus huéspedes “Las Nuevas Cámaras” que se encuentra justo al lado Oeste de Sanssouci.


Escondido en el follaje del parque, a unos 2 km. hacia el oeste se encuentra el “Nuevo Palacio”. Es un edificio grandioso del siglo XVIII, destinado a las visitas de estado y el alojamiento de los parientes de Federico II en los meses de primavera-verano. Cerca del parque Sanssouci también encontramos el palacio de verano “Orangerie” un pintoresco pintoresco invernadero-palacete.


Otra curiosidad digna de ver y que persigue el mismo estilo italiano es una hacienda, a unos 8 minutos a pie de la entrada principal de Sanssouci: La Krongut Bornstedt, edificada entre 1799-1867, fue habitada y administrada por los príncipes herederos Federico Guillermo de Prusia y su esposa, la princesa Victoria, primogénita de la reina Victoria de Inglaterra e Irlanda.

Desaparece el aeropuerto Berlín-Tempelhof


El aeropuerto de Tempelhof, en el centro de Berlín, ha cerrado sus puertas definitivamente. La baja rentabilidad ha sido el factor clave que ha hecho desaparecer este mítico aeropuerto.


La pista fue inaugurada en 1923 de manera oficial. Sin embargo, ya desde el 1909 se empezaron a hacer algunas pruebas de aviación llevadas a cabo por personajes tan importantes en el mundo de la aviación como Armand Zipfel y Orville Wright.


Antes de que se produjera la Segunda Guerra Mundial, el aeropuerto de Tempelhof acogía un total de 92 vuelos al día, cuarente de ellos de recorrido internacional. Tras esa macabra guerra, Alemania quedó dividida en cuatro partes y Estados Unidos se hizo con el control del aeropuerto. Lo utilizaron para proveer de alimento a los miles y miles de alemanes que se habían quedado en la calle, sin nada.


En 1993 Tempelhof se convirtió en un aeropuerto comercial. Eso sí, los pocos avances tecnológicos y la llegada de nuevos aviones más grandes, hicieron que el número de vuelos se redujeran considerablemente. Pese a que en 2004 ya se tenía que haber cerrado, los berlineses consiguieron prologar su vida hasta el 30 de octubre de 2008, fecha de su desaparición definitiva.

Piscinas flotantes en Alemania y Austria


A pesar de que Alemania y Austria son dos países fríos, os invitamos a que probéis las piscinas flotantes que se encuentran en Berlín y Viena. No queremos que os pongaís enfermos, no, sólo os invitamos a vivir una experiencia inolvidable en el interior de una Badeschiff.


Se trata de barcazas que contienen piscinas jacuzzi, solarium y cafetería en su interior. La que se encuentra en Viena, flotando sobre las aguas del río Danubio, resulta un punto de encuentro típico donde tomarse una cerveza por unos 8 euros.


Por su parte, la de Berlín cuenta con sauna y con unas vistas espectaculares de la ciudad. Creada en el año 2004, es todo un éxito en pleno río Spree. Además, cuenta con un bar al aire libre y con una pequeña playa artificial ideal para relajarse. El horario es de 12 de la mañana hasta las 00.00 horas (los fines de semana hasta las 03:00 horas). El precio de la entrada, de 12 euros, te da derecho a disfrutar de hasta 3 horas de servicio. Los días laborales cuesta 8 euros y también hay un bono de 10 entradas por 100 euros.

Hamburgo, la segunda ciudad de Alemania


Hamburgo es una ciudad alemana situada al norte del país. Segunda mayor en cuanto a población se refiere, es un estado federado al mismo tiempo dividido en 7 distritos: Altona, Bergedorf, Eimsbüttel, Hamburg, Mitte Hamburg, Nord Harburgo y Wandsbek. Goza de grandes parques y lagos y es la principal vía de acceso a las playas del Mar Báltico.

El clima es muy variable debido a su proximidad con el Mar del Norte. En un mismo día puede hacer frío y llover y al cabo de unas horas cambiar radicalmente la situación y hacer calor y sol. Las temperaturas medias diurnas oscilan entre 17 grados en julio y un grado en enero. Las temperaturas en verano suelen llegar a los 30 grados.

La oferta cultural de Hamburgo es muy amplia. Encontramos desde una gran variedad de museos hasta pubs nocturnos de lo más glamurosos. En general, hay 31 teatros, 6 teatros musicales, 10 cabarés y 50 museos públicos y privados. De los 4000 restaurantes, 2400 ofrecen cocina internacional.

Para los amantes de los paseos tranquilos, las orillas del lago Alster y del río Elba invitan a recorrer gustosamente buena parte de la ciudad. También podemos decantarnos por los viajes en barco, una opción ideal para conocer el puerto y el panorama de la ciudad.

El centro de la ciudad tampoco tiene desperdicio. Allí nos podemos perder en la multitud de tiendas que nos incitan a comprar o decidirnos por tomar algo en uno de los emblemáticos cafés al aire libre que hay en Hamburgo.
Los alrededores no se quedan atrás. El área de cultivo de fruta Altes Land (tierra antigua) con sus antiguas casas rurales es el destino favorito de muchos turistas aventureros, sea en autobús o sea en bicicleta.

El transporte público es una maravilla, como en prácticamente toda Alemania. Podemos desplazarnos rápidamente y a bajo coste con los modernos trenes o autobuses. Según la Comisión Europea, Hamurgo ocupa el cuarto lugar entre las ciudades de la Unión Europea con mejor red de transporte público.

Lugares de interés que no te puedes perder

– Landungsbrücken
– Justizforum
– Tag der Kunstmeile
– Farbige Wasserlichtkonzerte
– Hamburger Kunsthalle und Galerie der Gegenwart
– Monumento a Otto von Bismarck