Islas de Francia

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He de decir que me encantan las islas y me encanta escribir sobre ellas, debe ser porque vivo en una, aunque a veces resulta un poco agobiante la verdad. El caso es que como destino vacacional una isla siempre es una gran elección, especialmente si lo que quieres es descansar y relajarte en una playita durante todas tus vacaciones, aunque claro está que en una isla puedes hacer mucho más que eso. En Francia hay un montón de islas interesantes que pueden convertirse en tu paraíso particular, así que te traigo unas cuantas para que veas las opciones que tienes si te gusta el país vecino y quieres pasar allí tus vacaciones:

Ile des Embiez: Está frente a la costa de la Provenza y fue adquirida en 1958 por Paul Ricard, un magnate de las bebidas muy ecologista que controló muchísimo su desarrollo turístico, limitando las construcciones para que todas estuvieran en el mismo sitio y no se estropeara visual ni mediambientalmente todo el conjunto. Gracias a eso, la mayor parte de la isla sigue en estado salvaje con un montón de bosques de pinos, calas espectaculares, arroyos, praderas y viñedos varios.

Ile de Port-Cros: Está frente a la famosísima Côte d’Azur y tiene una espectacular vida marina. Practicar snorkelling allí es toda una aventura ya que puedes ver un montón de flora y fauna en unas aguas cristalinas fantásticas. En esta isla están prohibidos los coches y hasta las bicicletas, y es que no hay ni carreteras. Los isleños no pueden ni fumar para no estropear el medioambiente y la arena no se puede remover para que las playas permanezcan vírgenes.

Ile de Batz: Aquí se toman la vida con mucha calma y los granjeros utilizan caballos en lugar de tractores y los residentes bicicletas en vez de coches. Tiene unos jardines botánicos espectaculares gracias al microclima mediterráneo que hay en la isla. Solo hay una tienda de souvenirs en toda la isla pero sí hay varios restaurantes y playas, muchas playas, rodeadas de rocas y con calas preciosas para pasar un día en la intimidad.

Belle-Ile: Es una de las islas más grandes del país y allí acuden las familias de las clases sociales francesas más altas a pasar sus vacaciones. Sus tiendas y restaurantes son muy cosmopolitas, es como París pero en miniatura y en isla. Es muy bonita pero si quieres tranquilidad total te recomiendo que elijas otra más modesta.

Ile d’Oleron: Es la isla francesa más grande, exceptuando a Córcega, y es muy famosa por sus criaderos de ostras y sus marismas. Playas espectaculares de arena blanca y rodeadas de pinos y robles, ideales muchas ellas para practicar surf ya que tienen fuerte oleaje. Hay muchas rutas en bicicleta perfectas para conocer las mejores zonas de la isla.

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