Hospedarse en el St. Regis Bora Bora Resort


Algunos afirman que Bora Bora es la isla más hermosa del mundo, lo que la convierte indiscutiblemente en uno de los lugares más románticos que se puede visitar. Estas afirmaciones se pueden corroborar hospedándose en uno de los hoteles más bonitos que existen: el St. Regis Bora Bora Resort. Este hotel se está convirtiendo en un refugio para los enamorados y un lugar de ensueño para toda la familia.

Es uno de los alojamientos más impresionantes que se pueden encontrar en el Pacífico Sur. Combina sin ningún esfuerzo todo su esplendor con una gran elegancia y sobre todo un servicio muy personalizado. Situado en su propia isla privada, este “mundo” de 13.000 metros cuadrados, cuenta con un spa de altísima calidad donde podrás disfrutar en cualquiera de sus 7 salas de algunos de los tratamientos más relajantes a los que jamás te hayas sometido.


Después podrás darte un baño en la piscina Oasis. Es la piscina central y es toda una a maravilla de la naturaleza. Está formada por un swim-up bar y si decides bucear en ella encontrarás en su fondo un montón de peces exóticos e incluso alguna raya. En las instalaciones encontrarás diferentes villas de lujo en las que alojarte, pistas de tenis y un gimnasio que abre las 24 horas. Hay algo para cada miembro de la familia o el entorno.


Alrededor de la piscina Oasis encontrarás unas íntimas cabañas aisladas para que tengas la máxima privacidad con la persona que decidas ir. Si lo que quieres es que los niños estén entretenidos dirígete al Kids Creativity Club, donde se ocuparán de los niños realizando diferentes actividades dentro y fuera de las instalaciones: contar cuentos, manualidades, cursos de vela, natación, tenis, etc.